EL HADA VERDE

Una vez más la magia se ha roto. Todos hemos oído alguna vez la leyenda que gira en torno a la mística bebida espirituosa llamada Absenta. A principios de siglo XIX fue prohibida su fabricación y distribución debido a sus supuestos efectos alucinógenos, aunque en nuestros días podemos encontrar sucedáneos presumiblemente desvirtuada del agente perturbador. Las famosas tuyonas, procedente del ajenjo. Por lo visto alguna universidad con mucho tiempo libre, ha rescatado frascos de este jarabe antes del decretazo y han analizado su antigua composición, y han decidido que de alucinaciones nada de nada y que si Van Gogh se cortó el óvulo de su oreja bajo sus efectos, todo fue fruto de sus nada desdeñables 90 grados etílicos que contiene, aunque con semejante graduación lo extraño fue que no se cortara la cabeza. La procedencia del liquidillo, como es habitual, proviene de algún convento suizo (siglo XVII) donde las benedictinas daban rienda a sus apariciones, milagros y psicofonías entre trago y rezo. Llámese Agua del carmen, Quina San Clemente o Flores de Bach siempre se las ingenian para sintonizar en 5.1 con el de la barba o sus secuaces. El caso es que una vez más, todos estos estudios concienzudos se emperran en desprender a las leyendas y mitos de su irresistible fábula, aun poniendo en evidencia a genios como Van Gogh, Hemingway, Picasso, O. Wilde, Baudelaire entre otros. Pero yo desde aquella vez que me aseguraron con la ciencia en la mano que los disparos láser de los cazas X-Wing en las Star Wars en el espacio (interestelar, claro) no emitían ningún sonido, ya que sin oxígeno no se trasmiten las ondas, ya no me creo nada. Salud.

Yo, me quedo con estas secuencias. Mucho mejor.





Supersonic-Man