viernes, 1 de octubre de 2010

Protestar para sobrevivir




¡Qué gran titular!, ¡me encanta! Os propongo la lectura de este artículo de Josep Fontana, del diario Público de ayer, del que paso a transcribir los fragmentos que más me han gustado (y en negrita quedaría como un resumen).



“ (...) La catástrofe económica de 2008 se produjo al término de 30 años de un proceso creciente de desigualdad que hizo posible que los beneficios de las empresas alcanzaran máximos en 2004.


En mayo de 2009, cuando la catástrofe se había traducido ya en empobrecimiento y paro, un documento firmado por 40 economistas –entre ellos los premios Nobel Kenneth Arrow y Robert Solow– analizaba las consecuencias de lo que Paul Krugman ha llamado la época de “la gran divergencia”, y declaraba: “En ese tiempo, prácticamente todo el crecimiento económico de la nación fue a parar a un reducido número de nortea-
mericanos ricos. Una de las razones de peso que explican este paso que va de una prosperidad ampliamente compartida a una creciente desigualdad es
la erosión de la capacidad de los trabajadores para organizarse sindicalmente y negociar colectivamente”.

Parecería lógico que la conclusión a que se hubiera llegado a partir de estos datos fuese la de que había que reformar el sistema para hacerlo más equitativo, con el fin de aumentar la demanda y recuperar el potencial de trabajo que la crisis dejaba fuera de uso. Lejos de ello, los beneficiarios de este reparto desigual se están valiendo del potencial que les otorga el hecho de ser los dueños de los medios de información de masas para practicar un lavado colectivo de cerebro cuya finalidad es convencernos de que los males no se deben a sus errores de gestión y a su codicia, sino a que los gobiernos han gastado demasiado en servicios sociales. Su remedio consiste en dejar intactos los mecanismos que aseguran su enriquecimiento, equilibrar los presupuestos estatales disminuyendo el gasto en educación, sanidad o pensiones, y convencer a la inmensa mayoría de los perjudicados para que se resignen a un futuro con altas tasas de paro y un descenso de sus niveles de vida. Como ha dicho Mark Weisbrot: “Los medios de difusión de masas son, en el siglo XXI, una de las fuerzas más poderosas que bloquean el progreso económico y social. A ellos se debe que decenas de millones de norteamericanos estén convencidos de que los déficits del presupuesto son más importantes que las vidas arruinadas por el paro”.

(...)

Entre sus patrocinadores principales (en referencia al partido ultraconservador Tea Party) están los hermanos Charles y David Koch –dos de los hombres más ricos de Estados Unidos, propietarios de industrias altamente contaminantes–, quienes, a través de Americans for Prosperity, financian toda una serie de grupos que combaten la reforma sanitaria, los sindicatos, las medidas para prevenir el cambio climático, etc. Para entender cuál es el mundo que aspiran a crear, baste recordar que en 1980 David Koch se presentó a las elecciones por el Libertarian Party con un programa que proponía la supresión de la Seguridad Social, del FBI, de la CIA, del Departamento de Energía y de las escuelas públicas, entre otras instituciones del Estado.
Este es el futuro con el que nos amenaza la derecha y del que una socialdemocracia en quiebra no es capaz de defendernos.
Si aspiramos a sobrevivir, sólo nos queda volver a organizarnos para protestar.

(Ilustración de Federico Yankelevich) “




Debemos despertar a la realidad social que estamos viviendo, reconocer el engaño mediático, buscar fuentes de acción que en otros tiempos se utilizaron y que desgraciadamente es necesario resucitar: los movimientos sociales. No esperar que un partido político, un sindicato o una asociación me resuelvan los problemas. Hay que crear una voz en contra, una respuesta social sumando la respuesta de cada uno de nosotros, acudiendo a la fuerza que está en nosotros mismos.

hollín

3 comentarios:

Supersonic-Man dijo...

Los medios de información ya procurán de recordarnos una y otra vez de que tenemos vecinos que están mucho peor que nosotros y los paises que viven más holgados, pues estos no tienen playa, ni paella y su selección de furbo es una birria, y si tienen ocasión nos muestran el indice de suicidios por depresión, que quieras o no, son cosas que levantan ánimo.
Sobre la viñeta de forges me imagino que.... ¡¡¡GOLDINIESTA¡¡¡

Gracias por este post tan tonificante hollín y como dicen por ahí....¡¡hollín for president¡¡

Tío Einar dijo...

Sí, y cada vez más SÍ. Poco a poco, aunque uno no quiera el medio te obliga a posicionarte...es que es una ostia detrás de otra, y si te da por informarte y por investigar (un poquiiiiito) aún duele más. Y te sientes tán bien cuando haces algo (por pequeño que sea) y mediofunciona que da ánimos para hacer más cosas ;))) ¡Eres un campeona y una inspiración Hollín!

hollín dijo...

:)))))))) Moltes, moltes, moltes gràcies!!!
Sí, s'ha de fer alguna cosa, a veces te desanimas porque contra esos gigantes parece que nada es suficiente, pero nuestra resignación es su victoria, así que creo que todavía me queda cuerda para rato, jaaa!

Y hablando de movimiento social, la semana que viene os informo de la próxima "Assemblea de Barcelona" ;)

Petons!