Jean-Pierre Jeunet es uno de esos pocos directores que tienen un estilo visual tan definido que basta con ver unos minutos de una sus películas para reconocer al instante su autoría. Este toque mágico, es un don inestimable que distingue a aquellos realizadores dotados de una imaginación desbordante y nada convencional. Los directores que destacan por tener un universo creativo propio e inimitable, entre los que cabe mencionar a David Lynch y Terry Gillian, se caracterizan por hacer valer la intuición antes que la razón, el bombeo del corazón antes que la sinapsis cerebral. En el caso de Jeunet una vez más nos dejaremos embadurnar por sus filtros en ocre que nos acercan al mundo de comic y a ese pentagrama donde se cuentan los cuentos y sólo los cuentos, con alguna burbuja de surrealismo mágico y algo romántico, claro.Yo, desde que me abdució "La Ciudad de los Niños Perdidos", ya soy un incondicional.
Supersonic-Man
3 comentarios:
Ganas de verla,las hay.Siempre es bueno dejar volar la imaginación y dejarse envolver como un crio por lo menos durante 2 horas.
Soy incondicional de Delicatessen y La ciudad de los niños perdidos, Amelie (como no) me gustó mucho en su momento, pero Largo domingo de noviazgo, pues eso, se me hizo muy laaaaarga...espero reconciliarme con este geniecillo con esta peli que pinta bien pero ya veremos...
Por cierto, ya que nombras a Terry Gilliam, deciros que The zero theorem (¡con lo bien que pintaba!) ha sido definitivamente cancelada, parece ser que Terry anda muuuuuuy ocupado resucitando a su Quijote.
Resucitar al Quijote entra más dentro de su artillería.
Dales fuerte Terry¡¡¡.
A por ellos.......¡¡¡¡¡¡
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