PARAÍSO JUDICIAL

Hace unos días que me viene rondando un tema... ¿por qué tanto bombo con el juez Garzón? A lo largo de su trayectoria ha tenido momentos no muy honrosos, donde parecía que más que nada buscaba protagonismo, no se puede estar de acuerdo con todas sus actuaciones, y todos cometemos errores pero... creo que la cosa nunca se había puesto como ahora, atacado por medios de comunicación, políticos y jueces, ¡hasta por los propios jueces! Una guerra entre jueces no puede significar nada bueno, ¿me lo parece a mí o va a ser que el “poder judicial” está corrompido?

¿Qué está pasando? ¿En qué temas estaba trabajando Garzón para que se haya abierto la caja de los truenos? Baltasar Garzón, juez de la Audiencia Nacional, abrió la investigación del caso Gürtel (trama de corrupción que operaba en Madrid, Valencia y la Costa del Sol, actualmente con 71 imputados vinculados con el Partido Popular), e inició la investigación contra los Crímenes del Franquismo (concretamente sobre las desapariciones ocurridas durante la Guerra Civil y los primeros años de la dictadura, hasta 1952).

Por lo tanto, le están atacando porque estaba molestando a la derecha española.

Parece ser que el régimen de Franco dejó en herencia una bomba de relojería. Contra él están arremetiendo la Falange, el PP y un grupo de jueces procedentes o vinculados con la época franquista. Todos ellos carecen de principios morales y utilizan estrategias fascistas: acusar al adversario de estar cometiendo las mismas faltas y delitos que ellos mismos están practicando (esta es una de las técnicas promulgadas por Goebbels, el ministro de propaganda de la Alemania Nazi, la cual, ahora que miro hacia atrás, es la táctica que el PP viene utilizando desde las primeras elecciones en las que pude votar, en el 94).

Esta situación me parece muy grave. La Derecha está consiguiendo manipular las instituciones judiciales. Mientras estuvo en el gobierno se dedicó a situar a sus peones en cargos de estas instituciones, de este modo, cuando alguien pretende que se persigan los delitos que cometen, se le persigue judicialmente. También cuando un adversario político intenta ir en una dirección que no les gusta le paran los pies mediante jueces ‘amigos’. En caso de que se descubra que algún juez a delinquido en su favor (caso Gómez de Liaño), se le indulta y ya está.

Las leyes no van con ellos, están convirtiendo a España en un paraíso judicial. En el caso de Camps, el Tribunal Superior de Justicia de Valencia dijo que no había nada que juzgar. En el caso Gürtel/Correa, aprovechando la reciente ilegalización de las escuchas, quieren conseguir la anulación del resto de pruebas y por lo tanto de la totalidad del proceso.

¿Independencia judicial? Se supone que el CGPJ (Consejo General del Poder Judicial) es el órgano responsable de velar por esta independencia, fundamental en un Estado de Derecho. Su vicepresidente, Fernando de Rosa, es el primero que ha sugerido suspender de sus funciones a Garzón, por los tres procedimientos que hay abiertos en su contra, aún antes de que se determine si efectivamente dichos procedimientos van a acabar en juicio. También insiste en que su larga amistad con el presidente de la Generalitat Valenciana, Francisco Camps, desde los 18 años, no implica que sienta enemistad contra Garzón...

Con el tema de los Crímenes del Franquismo, se están pasando por el forro la recomendación de Naciones Unidas de poner fin a la Ley de Amnistía de 1977. Tampoco han querido tener en cuenta las alegaciones que Garzón a referido sobre jurisprudencia internacional. Pero es que, aunque muchos se empeñen en lo contrario, “los delitos de lesa humanidad no prescriben”, ni en África ni en Sudamérica ni en España, tal como ha denunciado la organización de derechos humanos Human Rights Watch:

"Los tribunales españoles, que se han distinguido por no investigar denuncias de delitos aberrantes cometidos en el pasado, curiosamente hoy están siendo activos en la investigación de un magistrado que buscó impulsar la rendición de cuentas por esas atrocidades... nos preocupa que un juez que tanto ha hecho por la justicia en el mundo, cuando decide centrar su atención en las injusticias cometidas en su propio país, se vea bajo ataque. Nunca pensamos que estas querellas llegarían tan lejos como para poner en peligro su carrera profesional...”

“Los tribunales españoles han impedido sistemáticamente las investigaciones sobre abusos cometidos durante la guerra civil que sufrió el país (1936-1939) y la dictadura del General Francisco Franco (1939-1975), invocando una ley de amnistía de 1977 que se aplica a todos los delitos 'de intencionalidad política' cometidos antes de diciembre de 1976.”

Recuerdo que cuando este juez anunció que iba a investigar los crímenes de dictaduras en Sudamérica me indigné, ¿para qué se iba tan lejos con el trabajo que había por hacer aquí? No es que no quisiera investigar los crímenes de nuestra dictadura, es que no se lo iban a permitir, como efectivamente está ocurriendo.

Como es natural, las asociaciones de víctimas de la dictadura están alucinando. Si se llegara a la conclusión de que el magistrado ha cometido un delito, sería algo así como considerar que las propias víctimas del fascismo también lo hubieran cometido, así como también las personas que llevan décadas reclamando justicia.

La derecha sigue con su discurso de “tranquilos, os perdonamos por haber perdido la guerra, pero estaros quietecitos, vale?” Necesitamos justicia, tanto por este tema como con los casos de corrupción. Ya basta de manipular el poder judicial para modificar la voluntad popular, un juez debe tener autoridad, no poder, ¡que son los jueces que están persiguiendo a Garzón los que deberían estar sentados en el banquillo de los acusados! Si esto sigue así ¿dónde iremos a parar? Y todo esto ocurre no estando el PP en el gobierno, no quiero saber qué pasaría si estuvieran en la Moncloa...

Mientras en Alemania se condena al octogenario nazi Boere, en España se persigue al juez que investiga al franquismo y la corrupción.

hollín