Sabíais que desde 1988 existía un local musical en Poble Nou donde podías acariciar tus oídos con cositas como Buthole Surfers, Biohazard, Naked City, Ministry, Orbital, Mr Bungle, Fishbone y un largo etcéteras de perlas como estas. Corrían tiempos de decadente post-maquineo y hedía por entonces un tufillo a ambientador de burdel en ciertos locales de moda. Por 1995 apuntarte al rollo de lo alternativo se limitaba a Nirvanear o desgañitar a botes con Killing in the Name como bandera de la desalternización musical que sufríamos por esas fechas. "Texaco" ubicado en C/ Pedro IV (Barcelona), floreció sobre un cactus con espinas en forma de gasolina motera y reminiscencias a Aerosmith y otras paradas asfaltadas sobre la Ruta 66, y evolucionó hacia sonidos más sofisticados y exóticos con una firme renuncia a decaer en fórmulas ya sobadas en locales colindantes. En esta zona, ahora en desconstrucción y tomada por grúas y campañas intoxicadoras del Ajuntament de Barcelona con vistas a planes urbanísticos bajo el estandarte de 22@, existió este oasis que sirvió de refugio emocional para que unas pocas e inquietas orejas, tuvieran una comunión social con los desheredados que sufríamos la inopia y el conformismo reciclado de promesas envueltas en un engañoso envoltorio independiente, sin recalar en la independencia del bagaje de nuestros gustos. O lo que es lo mismo, la puta mierda de música de siempre.
Por cierto, este entorno, esta música y esta incombustible dedicación, unió a unos cuantos canallas de buen gozar y mal vivir en un vínculo afectivo que por inercia a trascendido a cosas igual de hermosas y gratificantes. Esa llama sigue hoy encendida y el combustible que la encendió aún arde con Texaco.
Por cierto, este entorno, esta música y esta incombustible dedicación, unió a unos cuantos canallas de buen gozar y mal vivir en un vínculo afectivo que por inercia a trascendido a cosas igual de hermosas y gratificantes. Esa llama sigue hoy encendida y el combustible que la encendió aún arde con Texaco.
A todos aquellos que lo vivieron, lo desearon o se lo imaginaron. A Fanny y Germán.
Supersonic-Man
6 comentarios:
Joer tío, que me he emocionado...
El día que tiraron abajo el Texaco algo murío dentro de cada uno de nosotros, y me di cuenta de que nos habíamos hecho mayores (que no viejos). Quizás os parezca dramático esto que digo, pero es así.
Un abrazo para Fanny Y Germán. Vamos un poco perdidos desde que no está el Texaco!
Dia tras dia nos estamos dando cuenta que el mundo en el que crecimos está dejando de existir. El Texaco fué uno de los primeros ejemplos, pero lo podríamos extender al 7 pulgadas (punto a parte) Garatge Club (lugar de emblemáticas noches...), la libreria Tartessos, el cambio radical en la fisonomia de las tiendas de la calle tallers, el incremento de revistas gratuítas de tendencias, etc...
¿Fin de una generación? Jamás.
Barbasapiens
Parar,parar,que voy a llorar...pues sí,como aquí se dice el Texaco y otros buenos lugares se han perdido,pero...yo espero un nuevo resurgir.
Aquí o en algún otro lugar.
Gracias ha aquellos que han creído y disfrutado de estos recodos.
Lex Luthor
Hola,soy el German,hace tiempo que acabo la fiesta,pero solo en Poble Nou,ahora el Texaco vive en las montañas,en un pueblo cerca de Sort,aunque aun no hay fotos,os dejo la web de la casa para los que querais vivirlo de nuevo,gracias a todos....www.casaterraferma.net
Cruzar esa pesada cortina del texaco y el sonido... DreadUpControl En carrer correuvell o gignas... las noches interminables dl KGB, subirse a laEscuelita, la casa azul dl carrer cera o la sala bahía okupada d sants... q alguien siga! Yo ya estoy hiperventilando....
Qgrande! Ahi q nos vemos
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